Cuando trabajes, obtendrás tu recompensa.
13 de Enero de 2023. Hola, estás en el camino de la verdad, el camino de la salvación. Haga clic en este enlace, https://lechemenspanish.blogspot.com/?m=1 para encontrar todos los consejos. Compártelo con todos, para que conozcan el verdadero camino de Dios para poder asumir su responsabilidad.
Cuando trabajes, obtendrás tu recompensa.
Todos los hombres que entran para dirigir la
iglesia no están allí para enseñarle a la gente la palabra de Dios, sino para
ocuparse de sus asuntos personales. Se unen a esta organización criminal para
hacer dinero, para tener fama bajo la tapadera del hombre de Dios. Entran a
esto para ser holgazanes, no quieren aprender un buen oficio para poder
trabajar, sino que prefieren vestirse de traje para mendigar, para romperle las
muñecas a los pobres que no pueden ni comer para llevar dinero a la Iglesia.
Entran, a dar mentiras sobre la palabra de Dios para poder llevar a todos los
fieles de la iglesia a Satanás en el infierno. No trabajan para Dios, no pueden
esperar la recompensa de Dios y se apresuran a tomar la de Satanás en su lugar.
Cuando trabajas para Dios, obtendrás una recompensa única e invaluable. Esta
recompensa te la da nuestro Salvador, Él es quien está allí para hacerlo. ¿Qué
nos dará el rescate del Salvador cuando hagamos la obra de Dios? Es la vida que
nunca terminará, esa es la recompensa para aquellos que hacen la obra de Dios.
Pero los líderes de la iglesia no quieren esta
recompensa. Prefieren hacer tratos con Satanás para tomar el dinero de Satanás
en su lugar. Cuando rompen las muñecas de los fieles para darles dinero, es
para que Satanás se los coma, se coma a sus esposas y se coma a sus hijos por
el dinero que toman. Todo el dinero recaudado por la iglesia está maldito. Todo
lo que hagan con ese dinero será destruido. Los que la comen son comida del
diablo. Todo lo que compren con ese dinero será destruido. Cuando te comes el
dinero de la gente por el que no trabajaste, ese dinero se convertirá en un
fuego en tus manos que te llevará al infierno. No tienes derecho a tomar dinero
de la gente para predicar la palabra de Dios porque es el Salvador quien está
asignado para pagarte el rescate. ¿Por qué la iglesia está haciendo la colecta,
pidiendo a la gente que pague los diezmos, que pague las ofrendas? Porque la
iglesia es para Satanás, y él no hace nada sin dinero. Todo lo que está
haciendo, la gente debe pagarle por ello. Incluso para comerte, te hará pagar
de todos modos. Te hará pagar por algo, pero no te dirá que es porque te va a
comer, y te come.
Eso es lo que hace toda la gente de la iglesia,
tanto líderes como fieles, una vez que oran, piden dinero. Todas las peticiones
de sus oraciones son para que prosperen, para obtener dinero para tener lindas
casas, lindos autos, etc. La mayoría de las personas entran en la lógica, una
vez que oran deben obtener algo. Esto los hace cambiar a un montón de iglesias
para encontrar un pastor que pueda hacer que se beneficien de algo como dinero,
visas, trabajos, hombres con dinero, etc. Este dinero puede comprarles todo lo
que quieran. Cuando veas que circula una nota que dice: si envías este mensaje
a todos tus contactos, Dios te dará un regalo antes de ese momento. Si no lo
haces funcionar, algo malo te sucederá. Entonces, el mensaje ya se ha extendido
por todo el mundo muy rápidamente. Pero nunca obtienen nada como recompensa.
Persiguen el dinero, asocian a Dios con el dinero, y todo lo que piden es que
prosperen. Cuando eres así, Dios no se preocupa por ti, Él no escucha tus
oraciones porque estás trabajando para Satanás, estás haciendo circular los
mensajes de Satanás para hacer propaganda para él. El único lugar en la Biblia
que habla de prosperidad, dice que cuando guardas la palabra, aplicas la
palabra de Dios en ti y entonces prosperarás. Después de eso, no hay forma de
que puedas prosperar más. Así dijo nuestro Salvador: buscad primeramente el
reino de Dios y todos vuestros asuntos se arreglarán. Pero te niegas a hacer
eso, estás corriendo detrás de Satanás en busca de dinero, verás a dónde te
llevará.
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